Meditations in an Emergency

[Me enteré que murió ayer. Recordé súbitamente –como si no lo supiera ya– por qué nos encontramos sin salir de casa desde hace ocho meses. Traje a mi memoria la última vez que conversamos. Pensé en aquel sábado cuando Matilda y yo jugamos antes del virus. Fue mi maestro en la Universidad, después fuimos colegas. La luz brillante, las risas ¡los columpios! Esas cosas fantásticas que liberan la tristeza y lo sacuden todo. No fuimos amigos, sólo conservo su ritmo pausado al hablar. Repasé cada uno de los momentos de ese día en el parque como si con ello recogiera algo vital. Dejó de respirar. Regresé a los rostros, aquellos que conocí, que conozco y que no conoceré. Su nombre está en una esquela].

Meditations in an Emergency es un proyecto editorial que propone recuperar el ‘afecto’ a pesar de la distancia, de la pérdida y el duelo. Es un ‘libro de bolsillo’ sobre la amistad, el encierro, la soledad, el amor, las meditaciones urgentes, los pensamientos infantiles y la re-significación del gesto poético durante la pandemia del covid-19. Es la posibilidad de re-dibujar un ‘mapa afectivo’ a través de un puente epistolar. Contiene cartas de: Marcela Quiroz, Andrea Fuentes, Abril Castro, Mónica Castillo, Nayelli Zabaleta, Pilar Altamirano, Daniela Rea, Irmgard Emmelhainz, Daniela Libertad y Matilda Guzmán. Diez mujeres-niñas-mujeres que ‘detuvieron’ su tiempo emocional en un momento crítico, para escribir-meditar, en el acontecer de una emergencia.

El título del libro retoma uno de los poemas más emblemáticos del escritor y curador norteamericano Frank O’Hara (1926-1966; EUA) Meditations in an Emergency, el cual es parte de una antología con el mismo nombre. O’Hara, fue uno de los más destacados representantes de la primera generación de la Escuela de Nueva York. Tuvo una práctica artística versátil que fluctuó entre la música, el teatro, la curaduría, la crítica de arte y que condensó de manera genuina en la poesía. Su obra operó dentro de la radicalidad del ‘tiempo contemplativo’ ligado a la cotidianidad, al amor y al ocio. Ahora, un poema-su poema, planteado desde esta publicación (fue-es-será) una invitación para re-pensar los lazos que nos unen con otras personas en medio de una muerte interminable; para re-aprehender la vida a partir de formas más generosas (con la otredad, con otras especies, con la energía cósmica); y para abrazar y anclarnos a la poesía como un nicho de resistencia más necesario, cálido y vital