En nuestro actual viaje transtemporal aterrizamos en el año 2020 de la planeta tierra y nos hemos encontrado con un virus llamado SARS-CoV-2. Este virus causa Covid-19 y generó una pandemia globalizada que, a su vez, provocó una crisis sanitaria que ha detonado, acelerado y agravado una crisis económica originada e incubada por las propias dinámicas capitalistas. Se hizo aún más evidente que el sistema capitalista NO cuida la vida.

Así es que la Covid-19 ha causado muchxs muertxs, aislamiento y miedo. Estamos observando cómo han cambiado las relaciones terrestres al enfrentar este virus, cómo se relacionan con él y cómo azota a las comunidades vulnerabilizadas, ancianas, negras, latinas, indígenas, pobres, encarceladas y sin seguridad social.

La cuarentena develó aún más la disparidad de privilegios entre quienes pueden quedarse en casa, quienes tienen casa propia, capacidad de ahorro, trabajo con sueldo fijo y prestaciones de ley y quienes NO gozan de las mínimas condiciones de seguridad social.

Ahora más que nunca se han evidenciado las desigualdades sociales. El sector cultural, uno de de los sectores con mayor informalidad laboral que en muchos casos implica precarización y autoexplotación, ha quedado completamente desprotegido y a la deriva en este mar de incertidumbre.

En este territorio llamado México lix trabajadorix culturales y artistix visuales no cuentan con los mínimos derechos laborales –honorarios dignos y regulares, licencia por maternidad o enfermedad, seguro social, vacaciones, jubilación, entre otros–. Así que les toca cuidarse aún más, tanto individual como colectivamente, ejercitar sus músculos críticos manteniéndose sanix y en forma para organizarse y luchar. ¿Cómo pueden aprender de otras luchas laborales y hacer lazos con el gran sector de trabajo informal del cual la economía en México depende (de manera estrecha pero secreta)?

Con el Fondo de Apoyo PAC / Covid-19, la colectiva Invasorx realizó ENTRENAMIENTO INTENSIVO DE CUERPO ENTERO: 10 ejercicios intergalácticos para hogares artísticos, éticos y feministas, una serie de imágenes que se publicaron en español y en inglés, vía Facebook e Instagram desde el 21 de junio al 3 de julio del presente año, cuyo contenido tiene la intención de cuestionar prácticas de plagio, extractivistas, oportunistas y desvirtuar con ello dinámicas individualistas, depredadoras e impunes normalizadas en el mundo del arte. Con el fin de fortalecer la ética y los cuidados en el trabajo artístico.

Retomamos el concepto del ladrillo feminista que propone la autora Sara Ahmed: “Las citas pueden ser ladrillos feministas: son los materiales mediante los cuales, desde los cuales, creamos nuestros hogares.” Desde el humor trabajaron en textos y dibujos; ejemplificando el uso del ladrillo morado para desarrollar “músculos críticos” a partir de un entrenamiento corporal. Sin duda, estos músculos servirán para crear hogares artísticos donde prosperen las prácticas de reconocer, citar y apoyar el trabajo de otrxs compxs; quienes han cimentado nuestro ser y estar críticamente en la planeta tierra.

Invasorix cree que el confinamiento ha sido de diversas maneras un tiempo dentro del tiempo, experiencia que espera permita profundizar en la discusión colectiva de las dinámicas que han alimentado el ecosistema del arte actual, y que aún más lleve a sentir-pensar- imaginar-creer-crear otras formas de relacionarse colectivamente en y con la planeta tierra, y que no estén definidas por la explotación, la violencia y el especismo.

#FeminismosSinExtractivismos #FeminismosSinOportunismos #NoACopiRobar

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